Extracto:El problema para el mundo es que el impulso de los petroprecios presionaría al alza la inflación y supondría un obstáculo para la recuperación económica
Los precios del petróleo tienen presiones, tantas que incluso podrían dispararse por encima de los 100 dólares el barril, debido al colapso de las conversaciones de producción entre el grupo de países productores de petróleo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo más sus aliados (OPEP+).
Es probable ver que el petróleo llegue a los 100 dólares el barril, potencialmente incluso más; aunque también existen las mismas posibilidades de que los precios vayan a caer, según un consenso del mercado petrolero global.
En este contexto, el petróleo crudo Brent subió a su nivel más alto desde el otoño de 2018, antes de caer a 77 dólares por barril. Por su parte el crudo WTI, el precio de referencia de Estados Unidos, subió 0.78% a 76 dólares el barril, también un máximo de tres años.
Sucede que los precios se dispararon después de que las conversaciones entre el grupo de países productores de petróleo de la OPEP y sus aliados se suspendieran drásticamente.
Lo anterior, debido a que los Emiratos Árabes Unidos estaban descontentos con el nivel planeado de aumentos de producción. Molestó la forma en que se medirían los objetivos, lo que llevó a una ruptura con Arabia Saudita y Rusia.
No obstante, existían las mismas posibilidades de que los precios cayeran. Esto como resultado de que los miembros del grupo iniciaran en algún momento guerras de precios aumentando la producción por su cuenta.
Si no hay ningún acuerdo sobre la producción, y los países tienden a ir y elevar su propia producción, podría haber un colapso de los precios del petróleo, dijeron analistas de los mercados.
Apenas en 2020 los precios del petróleo se desplomaron cuando la pandemia se afianzó. Pero se han recuperado recientemente cuando las economías se reabrieron y la OPEP+ mantuvo bajos los niveles de producción. Los precios estuvieron por encima de los 100 dólares antes de 2014.
Los precios del petróleo están aumentando aún más, ya que la ruptura de las negociaciones de la OPEP+ está haciendo que la posibilidad de no agregar producción en agosto sea muy real.
La situación aún puede cambiar, por supuesto. Los precios pueden normalizarse, ya que las conversaciones no oficiales siempre están en curso y podría haber un avance repentino. Sin embargo, la falta de una nueva fecha oficial de reunión está preocupando al mercado.
En este contexto, la administración del presidente Joe Biden presiona a la OPEP y a sus aliados a encontrar un compromiso para aumentar la producción después de que el cártel finalizara abruptamente su reunión el lunes sin resolver la agria disputa entre Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos.
Aunque Estados Unidos no forma parte de las conversaciones sigue de cerca las negociaciones de la OPEP+ y su impacto en la recuperación económica mundial.
Es por ello que funcionarios estadounidenses se han comprometido con las partes pertinentes para facilitar una solución que permita avanzar en los aumentos de producción propuestos.
Un aumento de los precios del crudo, que están en sus niveles más altos desde 2018, ha contribuido a alimentar las preocupaciones sobre la inflación. Todo ello en un momento en que Biden ha hecho de la recuperación económica una prioridad clave para su gobierno y confía en que la inflación será transitoria a la hora de apoyar el gasto público adicional de más de 3 billones de dólares.